El Earth Overshoot Day 2024, que marca el día en que la humanidad ha consumido todos los recursos naturales que el planeta puede regenerar en un año, ha llegado en agosto, subrayando la urgencia de adoptar prácticas más sostenibles. Según Global Footprint Network, la humanidad continúa agotando los recursos del planeta en sólo siete meses, lo que evidencia un consumo insostenible a nivel global.
Frente a esta alarmante realidad, Schneider Electric, líder global en la gestión y automatización de la energía, ha hecho un llamado urgente para que las personas adopten prácticas más sostenibles en sus hogares. Carlos León de Garay, vicepresidente de usuarios finales de la compañía, destaca la importancia de la gestión eficiente de la energía doméstica como un medio esencial para reducir el impacto ambiental y avanzar hacia un futuro sostenible. 'Los hogares representan un sector importante del consumo energético global, y adoptar medidas sencillas en nuestras casas puede generar un gran impacto,' afirma León de Garay.
En apoyo a esta postura, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ha señalado en su informe ¿Cómo consumen energía los hogares? que las viviendas en América Latina y el Caribe son responsables de más del 16% del consumo total de energía. Este dato resalta la necesidad de implementar estrategias efectivas para optimizar el uso energético en los hogares de la región.
Schneider Electric propone tres estrategias clave para mejorar la gestión de la energía en el hogar:
- Fomentar una cultura de ahorro energético: convertir el ahorro de energía en un hábito familiar, involucrando a todos los miembros del hogar en la reducción del consumo energético.
- Inversión en tecnologías eficientes: sustituir bombillas tradicionales por LED, que consumen hasta un 80% menos de energía y tienen una mayor duración. Asimismo, la instalación de paneles solares es recomendada para generar energía limpia y renovable.
- Adopción de hábitos sostenibles: apagar las luces y desconectar dispositivos electrónicos cuando no estén en uso, ya que muchos aparatos siguen consumiendo energía en modo de espera. Además, lavar la ropa con agua fría en lugar de caliente contribuye al ahorro energético.
La gestión eficiente de la energía en el hogar no solo permite un ahorro económico, sino que también es una herramienta poderosa para reducir la huella ecológica y promover un futuro más sostenible. A través de estas prácticas, cada individuo puede contribuir significativamente a combatir la sobrecapacidad ecológica del planeta, impulsando un cambio hacia una mayor sostenibilidad global.
